Entrevista a Ana Milán en "El Referente"

¿Cómo afrontaste esta nueva aventura?

Al principio lo afronté con muchísimo miedo, la verdad, fue como un estado de pánico, sobre todo la mañana en la que empecé a grabar. Me dije, “¡qué hago aquí!”. Luján había dejado el listón altísimo, pero enseguida me lo empecé a pasar bien, y eso suele ser bastante garantía de que la gente también se lo va a pasar bien. Ha habido dos etapas: primero el miedo y luego el disfrute absoluto.

¿Eras seguidora del concurso?

Yo llamé a mi representante y le dije que quería ir como concursante, y fui. Sólo me falta ser concursante porque ya he visto el programa desde casa, fui como invitada y lo estoy presentando. Pero me imagino que no me dejarán.

¿Qué novedades trae el programa este año?

Hay varias novedades. Cada día hay un ganador de ‘Password’ que vuelve al día siguiente y puede optar a un bote que va incrementando cada día en 1.000 euros. Hay otros cambios en el formato, pero eso tendréis que verlo porque si lo cuento todo pierde la gracia.

¿A qué crees que se debe el éxito del programa?

Si supiera cual es el éxito de ‘Password’ tendría una productora y estaría forrada. Yo no sé dónde está el éxito, no tengo ni idea. Creo que tiene mucho que ver con las ganas de un equipo, la cadena, la chica que hace maquillaje, el catering… tienen ganas y aportan la energía necesaria para pasártelo bien.

Tú has tenido muchísimo éxito en todos los trabajos que has hecho, ¿no?

Es que yo tengo muchísima suerte desde que nací. Me considero una mujer con mucha suerte.

¿Vas a dejar aparcados otros proyectos?

No voy a aparcar nada, lo llevo todo en la autopista. Desde que empecé a trabajar he hecho dobletes, así que el agobio para mí es cuando me digo, “¡uy!, ¿sólo estoy trabajando en una cosa?”.

¿Qué supone estar en este programa?

Estar en ‘Password’ es un atrevimiento por mi parte porque he llegado a un mundo donde hay gente que lo sabe hacer muy bien. Yo lo que quiero es que todo el mundo pueda pagar su hipoteca. Lo estoy haciendo con todas mis ganas.

¿Has recibido algún consejo de Luján Argüelles?

Yo tenía una premisa, no medirme con Luján. Si lo hacía, tenía la partida perdida de antemano. Me tenía que medir conmigo nada más. A mí me da pánico sustituir a Luján. Sustituir nunca ha funcionado. Yo le decía, bromeando entre risas, “tú no has estado presentando ‘Password’, tú has estado siendo telonera mía”.

En cuanto a ‘Física o Química’, ¿qué opinas de las críticas vertidas por las asociaciones de padres?

Yo creo que es ficción. Me sorprende mucho que todas esas asociaciones de padre no las he visto levantar la voz frente a casos reales de pederastia. El telediario está repleto de casos reales. Esto es ficción, y no sólo hay un niño que se droga, también hay otro que estudia. No se está haciendo demagogia.

Es como si la gente levantara la voz contra ‘House’ y dijera “como un tío que no hace una radiografía sabe un diagnóstico”. ¿Estamos tontos o qué nos pasa? Esto es ficción, una historia que genera un guionista. Yo no estoy yendo a ningún instituto a decirles a los niños que se metan rayas.

¿Va a haber algo de interpretación en el programa o veremos a Ana Milán tal y como es?

No, soy la Ana más Ana, la gamberra, la más torpe, la que mete la pata… La Ana más Ana.

Siendo una mujer de carácter, ¿meterás caña a los concursantes?

Sí, pero caña que se nota que está muy hermanada. Ya veréis, es como una reunión de amigos de verdad.

Y con los tuyos, ¿tienes el mismo carácter?

Yo es que no tengo carácter, lo que pasa es que soy muy alta y tengo la voz de Leonard Cohen. Yo tengo un carácter muy suave, en realidad, lo que pasa es que yo no me callo nada. Es muy raro verme muy enfadada.

Con tanto trabajo y tanto éxito, ¿crees que has llegado a tu madurez como artista?

No, sólo tendré esa certeza cuando tenga 65 años, esté subida a un escenario y diga, "pues esto ha funcionado. Somos mientras estamos, cuando dejamos de estar dejamos de ser.